Seguro que muchos de ustedes han oído hablar de la presbicia, o quizás de el nombre más común con el que se conoce este defecto ocular, la vista cansada.
La presbicia o vista cansada, es un problema de la vista que se suele manifestar entre los 35 y 50 años, y que afecta a muchas personas, a medida que sube la edad en la que hagamos el estudio, se estima que puede llegar hasta proporciones del 90% de la población para una edad de 65 años.
Al afectar a una parte tan grande de la población, médicos y científicos se esmeran en encontrar formas de acabar con este problema que en la actualidad es uno de los que más se manifiesta en cuanto a defectos de la vista se trata.
¿Qué es la presbicia?
La presbicia o vista cansada, aparece en las personas mayores de 40 años por regla general, y va aumentando la cantidad de afectados a medida que aumenta la edad que tomamos como referencia.
Este defecto de la vista, consiste en la dificultad para observar objetos, leer, ver el ordenador… a poca distancia, debido a que a la vista le cuesta acomodarse y enfocar ante la nueva situación, comúnmente se conoce como el defecto de ver de cerca.
En este proceso el músculo ciliar tiene una función fundamental ya que es el responsable de cambiar la forma del cristalino, para que nuestro ojo se adapte a la nueva situación.
Un claro ejemplo de este problema, es cuando las personas de más de 40 años, se disponen a leer un libro, y en su intento por comenzar la lectura, observan como las letras están algo borrosas, por lo que recurren a alejarse del documento, y es entonces cuando la vista enfoca, pero el libro está tan alejado, que resulta imposible distinguir entre las letras, en este caso, por la distancia.
¿Cómo detectar la vista cansada?
Como hemos comentado antes, encontrar problemas a la hora de leer un libro o ver el ordenador de cerca, serán los síntomas más claros de que estamos comenzando a sufrir de presbicia.
Si tenemos dudas y nos encontramos entorno a los 40 años de edad, siempre es recomendable acudir a un centro especializado donde puedan evaluar nuestra situación y realizar un estudio personalizado del paciente, para poder determinar si se trata de vista cansada, u otro defecto ocular.
En una consulta oftalmológica, detectar este tipo de problemas resulta sencillo y rutinario, por lo que no debemos preocuparnos.
¿Qué soluciones hay para la presbicia o vista cansada?
Lo cierto es que la medicina ha avanzado notablemente en los últimos años, y ofrece diferentes posibilidades para cada tipo de paciente que sufre este tipo de problemas.
Actualmente, las mejores opciones para acabar con la presbicia son:
Las gafas son el remedio más común para que el paciente recupere la vista de corta distancia, sus resultados son inmediatos. En caso de que ademas de presbicia suframos miopía, es posible que se nos diseñen unas gafas especiales para acabar con este problema en un solo par, o por el contrario, tener dos gafas, una para cada situación.- Las lentes de contacto, o comúnmente conocidas como lentillas, se pueden adaptar para combinar la vista de cerca con la lejana sin necesidad de cambiar de lente.
- Donde más han avanzado los tratamientos es sin duda en la cirugía, pues hoy en día es posible colocar una lentilla intraocular, que produce al ojo el efecto de poder enfocar con mayor facilidad, y por lo tanto, eliminar la presbicia.
Evidentemente, cada técnica tiene sus ventajas e inconvenientes, si bien es cierto que la cirugía es la solución más cómoda y estética, también es la más cara y arriesgada de las opciones más comunes.
Debemos tener en cuenta que tipo de problema sufrimos, si es muy grave o no, y que tal llevaríamos el utilizar gafas para leer o lentillas.
Si usted tiene dudas acerca de cuanta presbicia sufre o comienza a notar los síntomas que anteriormente comentábamos, le aconsejamos acudir a un especialista de inmediato con el fin de diagnosticar de la mejor forma posible su defecto en la vista.
Además en la propia consulta podrá resolver todas las dudas que tenga acerca de cualquiera de las alternativas para solucionar su presbicia.
Siempre os aconsejamos acudir a centros especializados, y clínicas reconocidas, pues el tema de la vista, es muy importante, y un tratamiento bien realizado, nos dejará satisfechos, pero si por ahorrar un poco de dinero, sufrimos las consecuencias de la falta de profesionalidad, podemos crearnos un grave daño en muchos casos irreversible.
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